La policía de Japón arrestó a un hombre de 59 años que se sospecha que dejó los cadáveres de sus padres dentro de un refrigerador en su residencia en la Ciudad de Fukuoka el mes pasado, informó el Nishi Nippon Shimbun el pasado 5 de julio. Alrededor de las 09:00 horas del domingo 4 de julio, la policía detuvo a Junji Matsumoto, sin ocupación conocida, en el estacionamiento de un hotel en la Ciudad de Kioto.
Tras su arresto bajo sospecha de abandonar un cadáver, Matsumoto admitió las acusaciones. El 28 de junio, varios agentes entraron en la residencia en el distrito Nishi de la Ciudad de Fukuoka y encontraron los cuerpos dentro del refrigerador industrial con puerta de vidrio. Posteriormente, la policía confirmó que los cuerpos son los de los padres del sospechoso, Hirokazu, de 88 años, y Makie, de 87 años. Los resultados de las autopsias no revelaron las causas de la muerte.
Matsumoto compartía la residencia con sus padres. Un testigo le dijo a la policía que lo vieron de compras en una tienda departamental en Tenjin con Makie el 20 de junio. A principios del 28 de junio, un familiar se puso en contacto con la policía después de que los ocupantes de la residencia “no reportaran ninguna noticia” durante un período prolongado. A la llegada de la policía, el frigorífico estaba sellado con cinta adhesiva. Un examen de los cuerpos no mostró signos de heridas externas.
La policía de Japón dijo que Matsumoto huyó de la residencia en bicicleta la noche del 23 de junio. Luego viajó en tren a las prefecturas de Yamaguchi y Shizuoka, donde se hospedó en hoteles. La policía realizó las investigaciones pertinentes sobre los hechos, consiguiendo la declaración de Matsumoto, que fue explicada en un artículo publicado por Yahoo! News Japan y que expresó: «Según los investigadores, Junji admitió haber matado a estas dos personas alrededor de la noche del 21 de junio, diciendo que Hirokazu le había pedido que los llevara al baño. Dijo: “Cada vez que mis padres me pedían que los cuidara, tenía que interrumpir los animes que estaba viendo. No podía soportarlo más“. En cuanto a la Sra. Makie, dijo: “La maté porque me vio matar a su esposo y me dio pena dejarla sola“. Junji vivía con sus padres con su pensión, Makie estaba en silla de ruedas, y Hirokazu fue hospitalizado en junio tras caerse en su bicicleta. Desde entonces, Junji había estado cuidando de ellos, incluso alimentándolos».
Fuente: Yahoo! News Japan / Japón
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