lightbulb_outline La siguiente reseña Dororo – Capítulo 13 contiene spoiler, si ya viste el capítulo por
favor sigue leyendo, sino puedes verlo en cualquiera de las plataformas. Aviso,
esta serie es algo gráfica, atractiva, curiosa y muy entretenida, te encantará
seguir esta historia y recuperar las extremidades vendidas.
CAPÍTULO 13 “LA HISTORIA DEL BUDA DE ROSTRO EN BLANCO”
OPINIÓN CAPÍTULO 13
Dudas, incógnitas e inquietudes… son los sentires que todo ser manifiesta justo en las noches oscuras, esas noches que te hacen ver al cielo y preguntarte mil cosas de las cuales obtienes pocas respuestas, pues está claro que en esas altas horas de la noche y de insomnio, no se obtendrá nada hasta que el sol aparezca… Lo cierto es que la espera por esta nueva fase de Dororo, nos tenía a todos con la mente hecha un lió y más al ver los avances de esta segunda parte y sí, claro que me refiero a esas escenas en específico. Pero para suerte de nosotros, la historia sigue su conducto, sigue exactamente donde finalizamos aquella fase, ese triste capitulo en el que Hyakkimaru descubre la verdad, donde su padre intenta acabarlo a como dé lugar, su hermano se une a la extinción del ahora señalado demonio de Daigo y su madre hace un sacrificio por aquel hijo que no logro proteger en aquel entonces. Y en todo esto, solo resalta el apoyo y compañía de quien ha estado con firmeza a su lado, Dororo.
Sumergirse en los pensamientos y fundirse en todo aquello que nuestra mente pueda recrear, nos aleja de la realidad y de lo que tenemos enfrente, pero si en esta peligrosa práctica mental, llevamos como fin vengar nuestras heridas… seremos los únicos que acabaremos con lo poco que apreciamos de la vida. Quizás la mayoría salimos a flote de aquel encierro mental, que en su mayoría es gracias a otros, como Dororo y su preocupación por el bienestar de su única compañía, tanto así que los medios para rescatar algo de serenidad en Hyakkimaru, sea a través de una sana mentira.
No confundamos el sano beneficio, por uno arreglado y poco merecido, recordemos que no toda lluvia trae consigo la calma… y los oscuros tratos, no se cancelan, ni se pasan por alto, pues todo en esta vida tiene un pecio y un engaño. Es aquí donde debemos no solo abrir nuestros ojos, sino también nuestra mente, para que no lo perdamos todo por creer en falsos beneficios, falsas compañías y falsos líderes. Pues después no tendremos cara para enfrentar las consecuencias de nuestra poca visión y de nuestro poco saber (Las escenas no pueden ser más claras y gráficas).
Luchar contra la verdad o algo que vez pero no puedes creer… puede generar dolor, desesperación y depresión, es allí donde tu cuerpo solo se dejara llevar, te hará disfrutar del momento y no dejara cabida a los pensamientos, como aquellos que pueden nacer en la mente de un pequeño que lo perdió todo y ahora cree recuperar algo que le es muy valioso, su madre. Pero esta serie nos muestra la crudeza de la realidad en su forma más folclórica y humana, como las artimañas y el egoísmo, que impulsan al ser a utilizar los medios de los que se apaña, para obtener sus propios beneficios… el desespero de una pobre y vacía alma, no tiene límites a la hora de buscar un falsa y cómoda redención (Sencillamente, nos duele la ilusión de Dororo).
La verdad es que Fudō Myō-ō es una de las fieras deidades guardianas del culto budista o budismo esotérico. Es una deidad protectora en el budismo shingon y es clasificado entre los reyes de la sabiduría. Con su mano derecha empuña una espada flamígera para cercenar la cabeza del mal, y con la izquierda sujeta una cuerda para sacar a flote a sus aliados ¿De dónde los saca a flote? Pues sus llamas lo dicen todo, él es quien lucha contra el mal en el mismo infierno, pero en esta situación, su cuerpo fue invadido por un demonio vanidoso, que no encuentra sentido de su presencia entre los vivos, si no tiene un rostro que exprese su horrible mal. Es allí donde aquel camaleón que sirve a aquella estatua de Fudō, intenta encontrar el rostros perfecto que encaje en su abandonada creación (otra versión de Sleepy Hollow).
Siempre he resaltado la valentía de Dororo por encima de los demás personajes y me gustaría decir que no lo hago solo porque es un niño que ha demostrado una valentía que poco se ve, pero si, esa es la razón y por muchas más, pues su impulso no ha sido solo por Hyakkimaru, ha sido por todo aquel que inspira respeto, valor y afecto en el corazón de Dororo… pero las prioridades son claras y para él en estos momentos y por lo que llevara de vida, su importancia se centra y centrara en su hermano y compañero de vida. Ahora bien Hyakkimaru no se queda detrás de estos halagos, aunque su personalidad no es la más afable, el siempre defenderá y luchara por Dororo. Pero el enfrentamiento está claro, una estatua que es todo un cumulo de maldad y un títere hueco que solo tiene un propósito para poderse salvar, harán cuanta artimaña sea posible, para obtener aquel rostro poco común y recientemente recuperado de Hyakkimaru.
Como si lo hubiese planeado, Dororo logro apaciguar el egoísmo y la ansiedad de aquel escultor que no encontraba un rostro digno para su escultura, cuando simplemente al tallar, ya era digno de apreciar y admirar por ser simplemente su creación. Todo acabo en la primera oportunidad que Hyakkimaru obtuvo para atacar a la estatua degolladora y con ello fue el fin de una pobre alma prisionera por su propia insatisfacción y el fin de lo más cercano que ha tenido Dororo después de la pérdida de su madre.
No sé qué decirles acerca de esta escena y que no parezca el chillido emocional de alguien que ve por vez primera un beso, pero la verdad es que esta ¡Demasiado bueno el momento! Escuchar más de seguido y fluido el hablar de Hyakkimaru es muy reconfortante y su cercanía con Dororo lo es aún más. No sé si hablo por algunos cuando digo que esa escena del agua termal en los avances la mal interprete… pero bueno. En cuando a aquel mapa detrás de la espalda de Dororo, podría tener algún significado y quizás aquel camino del que les hable en el capítulo anterior, en realidad si este trazado y los extras de aquellos niños monos debían salir, pues Hyakkimaru y Biwa Hoshi “Son ciegos” y por eso no lo habían notado ¿Sera Dororo quien traza las rutas que él y Hyakkimaru siguen por algún motivo? O quizás no sabe nada y todo sea una coincidencia ¿Quién sabe?
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