Esta reseña sobre Megami no Café Terrace contiene spoilers. Si no has visto los capítulos, te recomendamos hacerlo y después regresar a leer la reseña.
Megami no Café Terrace – Capítulo 2: Una promesa con la abuela
Luego de haber decidido reabrir la cafetería, y con el hecho de que ahora compartirán la casa, Hayato quiere separar las labores domésticas entre todos, sin embargo, ninguna de las chicas está entusiasmada por ello. Ya que esas labores siempre las hacía la abuela Sachiko. Al final, con las participación de Shiragiku y el mencionar la posibilidad la abuela haya muerto prematuramente por la carga con las labores, todas las chicas terminan ayudando con la limpieza. Encontrándose con un problema cuando Hayato intenta tender la ropa, incluida la ropa interior de ellas.
Antes de poder volver a abrir la cafetería, Hayato quiere hacer una pre-apertura, ya que no puede estar seguro de que el local vaya a funcionar sin antes haber probado las preparación del café. Habiendo visto a su abuela hacerlo por años, Hayato está confiado en su preparación, sin embargo, el resultado es pésimo. Siendo un café que no pueden vender. Por lo que se pone a practicar, encontrándose con Akane, quien fue la que lo reprendió en un inicio por el sabor del café. Enterándose de que la abuela le enseñó a ella como prepararlo, así que le pide le enseñe a hacerlo.
Al día siguiente, Hayato en compañía de Riho se dirigen a hacer visitas de cortesía a los proveedores, para avisarles la decisión de reabrir la cafetería. No obstante, la poca comunicación y participación de Hayato en las mismas hace que sean incómodas, siendo salvado en cada una de ellas por Riho. Al final del día, la última visita la hacen al templo local, siendo una tradición que hacía la abuela. Es donde Riho aprovecha para reprender a Hayato por su falta de determinación para dirigir y mantener la cafetería.
Los miembros de la ‘familia’
En Megami no Café Terrace – Capítulo 2 se revelaron un poco más de detalles de los personajes, especialmente sobre las heroínas. Siendo prácticamente su presentación, diciendo su edad y “ocupación”. Algo que ma generó incógnitas en algunos de los casos.
Primero que nada, el aura madura y seria de Akane me hicieron creer que ella sería la mayor de todas. Sin embargo, no es así, en su lugar tiene la edad aproximada del protagonista. Aunque al final, el que tenga una edad menor a la que imaginaba no cambió mi percepción del personaje hasta el momento. De hecho, ahora veo más posible que su ‘buscavidas‘ sea debido a incordios familiares por estar en una banda.
La que más llamó mi atención entre todas las heroínas fue el caso de Ami, quien es la menor de todas y es la única que aún cursa preparatoria. Ciertamente se sentía que era la menor por su comportamiento, pero no creí que hasta ese punto. En especial por el hipotético motivo que podría haber detrás del que Ami no esté viviendo con sus padres. Aunque hay una gran cantidad de maneras de explicar esto, siendo cliché muchas de ellas (como el que su familia esté en el extranjero/ otra ciudad por trabajo). Honestamente ahora tengo algunas esperanzas de ver drama en el trasfondo y desarrollo del personaje.
Sobre las demás heroínas fueron justo como imaginé. Siendo Riho y Shiragiku las mayores, después de todo en el episodio anterior Shiragiku bebió alcohol y parecía que Riho fue quien lo consiguió.
Por cierto, luego de ver un poco más de la personalidad de Riho en Megami no Café Terrace – Capítulo 2 debo aceptar que ahora me gusta más el personaje. El que fuera directa con Hayato (tanto en regañarlo como en darle fanservice) fue algo que realmente me agradó del personaje. Además, me pareció interesante ver que la visita al templo se aprovechara de esa manera, dando indicios de su posible relación con el protagonista.
Lo que también creo mostró un poco más el toque más “adulto” que tendrá la trama, refiriéndome principalmente a los momentos ecchi/fanservice, al no ser únicamente afortunados accidentes, también que sean provocados por los propios personajes.
Hasta el momento, mis favoritas son Akane y Riho, ya que presiento serán las proactivas para acercarse a Hayato. Algo que siempre me ha gustado en los personajes, y aún más en estos casos con Harem. Después de todo, un harem de puras indecisas y/o tímidas solo siento que hacen una carga aburrida para su respectiva serie.
El tipo de protagonista
Desde el principio de Megami no Café Terrace, la protagonista Hayato me pareció molesto por su personalidad y mentalidad inmadura. Si bien apenas es el segundo episodio de la adaptación al anime y bastante pronto en la misma, siento que no le veo futuro al personaje. Por lo menos un desarrollo que sea un gran cambio en el mismo en corto tiempo.
Acepto que tiene ese toque más “adulto” y que lo mantiene alejado del término ‘princeso‘ en situaciones ecchi. No obstante, tampoco es como que sea completamente inmune a las mismas, mostrando nerviosismo y vergüenza cuando es atacado directamente por las mismas. Como el coqueteo de Akane o el ‘servicio‘ de Riho en Megami no Café Terrace – Capítulo 2. Al final prefiero ese tipo de actitud en el protagonista de un Harem/Ecchi que uno que se sonroja por el más mínimo acercamiento de las heroínas.
Pese a que eso le dé puntos a favor al personaje, su cierta falta de delicadeza, ignorancia y arrogancia son cosas que para mí están resaltando demasiado en el personaje. Claro que esto también puede ayudar al desarrollo del personaje en el futuro, pero por el momento Hayato me parece bastante molesto.
Detalles de la producción de Megami no Café Terrace – Capítulo 2
Justo como recordaba y sospechaba, la calidad de animación de Megami no Café Terrace es un tanto irregular. Habiendo momentos en los que el diseño de personajes me parece anormal, con proporciones extrañas. Además, la fluidez del movimiento es algo que también creo se queda en lo aceptable, habiendo momentos de mejor fluidez y otros en los que se nota un tanto robótico. Por ejemplo, en Megami no Café Terrace – Capítulo 2 está la escena del acercamiento de Akane a Hayato antes de enseñarle a preparar el café, siento que el movimiento de Akane es bastante plano. Evitaré hablar de la calidad de la animación en el futuro, a menos que sea realmente relevante como una caída en picada o un ascenso agigantado.
Por supuesto, el anime también tiene sus momentos para brillar en cuanto a animación, y personalmente creo que lo están enfocado todo en el fanservice. Teniendo buena calidad de dibujo y muy poca censura. Después de todo, los momentos de Ami y Ouka desnudas en el baño la censura se limitaba al cabello y/o los haces de luz. Unos bastante delgados a comparación de otras producciones. Considero que el estudio está haciendo un excelente trabajo en esta área. Una que al final siempre va a ser un punto de importancia en el Ecchi y por la cual el género vende. Y por el momento, no he sentido ninguno de los momentos fanservice como forzado, quizás el más cercano haya sido el que Hayato viera la ropa interior de Ouka en las escaleras, pero eso solo por ser algo cliché.
El ending “Dramatic (ドラマチック)“, interpretado por Miki Satou, me pareció bueno para la serie. Quizás con un ritmo algo tranquilo, que me hizo sentirlo más adecuado para un anime de Recuentos de la Vida que para un Harem/Ecchi. Por lo que aún sigo prefiriendo el opening como mi tema favorito de esta adaptación animada.
Por cierto, la escena de Shiragiku tratando de ser informal con Hayato la sentí como “relleno” en el episodio. En otras series, ese tipo de momentos hubieran sido mostrado como una simple imagen de transición entre escenas. Imagino que esto lo aprovecharon para poder adecuar la duración del capítulo y finalizara en el punto en el que lo hizo.
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