Tras más de 40 horas de juego (y que de hecho seguimos jugando para descubrir más cosas), hemos llegado a la conclusión de que el hoy estrenado God of War: Ragnarok no sólo supera al insuperable juego previo de 2018, ¡sino que se yergue como el mejor videojuego de 2022 y sin duda uno de los mejores que hemos experimentado en la historia!
¿Por qué decimos todo esto? Los invitamos a leer nuestra reseña, la cual está totalmente LIBRE DE SPOILERS.
Esta es la sinopsis oficial de Ragnarok:
El Fimbulvetr está en marcha. Kratos y Atreus deben viajar a cada uno de los Nueve Reinos en busca de respuestas mientras las fuerzas asgardianas se preparan para la batalla profetizada que supondrá el fin del mundo. Por el camino, explorarán paisajes míticos increíbles y se enfrentarán a temibles enemigos, como monstruos y dioses nórdicos. La amenaza del Ragnarök está cada vez más cerca. Kratos y Atreus deben elegir entre su propia seguridad y la de los reinos.
De hecho, una explicación detallada de lo ocurrido en el juego anterior la pueden leer en ESTE ENLACE, totalmente en español.
OTRAS RESEÑAS: SCORN
Si jugaron la secuela/reinvención de God of War en 2018 (que amamos los videojuegos anteriores, cómo no), seguro recuerdan su impecable sistema de juego, progresión y técnicas de combate variadas. ¡Pues bien, aunque parezca imposible, Santa Monica Studio logró mejorar el gameplay del juego anterior! Los enemigos son más abundantes y variados que su predecesor, con énfasis a un mayor número de adversarios principales que requieren de técnica y desarrollo de los personajes suficiente como para lograr vencerlos, pero jamás frustrantes, como para abandonar la odisea “final” de Kratos.
Visualmente magnífico. Tanto si se encuentran en una batalla encarnizada (con MUCHOS y diferentes adversarios, por cierto), como si tan solo este están trasladando de un punto a otro el juego, el espectáculo es visualmente impresionante; pueden incluso detenerse a observar por largos momentos el maravilloso e impecable paisaje, las partículas de nieve, de polvo y otros efectos visuales asombrosos.
El control DualSense hace aún mejor está experiencia tanto con la vibración haptica cómo el gatillo adaptativo, logrando una inmersión muy superior a la que lograrías en PlayStation 4, donde por cierto el juego se defiende visualmente pero jamás llegará a los estándares de la nueva consola PlayStation 5.
De hecho, después de comparar ambos modos visuales (Rendimiento vs. Desempeño), podemos sugerirles que el mejor modo es el que entrega 60fps, debido a que, aunque sí se nota una ligera calidad superior con el raytracing, los 30 cuadros por segundo no son suficientes para poder disfrutar un juego en el que se requiere tanta agilidad. Es una pena que, estando en este punto de la actual generación de consolas, no haya todavía un punto medio entre estos 2 modos (aunque algunos juegos de PlayStation sí han ofrecido un modo que combina ambas virtudes visuales).
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A nivel sonoro, la banda sonora es inmejorable, pues acompaña –sin jamás aburror– todo tipo de momentos durante el juego y esas cinemáticas que te dejarán con el alma en un hilo, gritando o incluso te sorprenderán desprendiendo un par de lágrimas. Pero no diremos nada más, porque preferimos dejar que la historia los sorprenda por sí misma. ¡Eviten ver gameplays del juego en YouTube, esto DEBEN vivirlo con control en mano! La localización de voces tanto en español latino como europeo son exquisitas y de muy alto nivel, rivalizando incluso con el reparto de actores norteamericano de origen. ¡Y por favor usen unos buenos audífonos o los Pulse 3D para vivir ese sonido atmosférico que solo se puede disfrutar por completo en una consola PlayStation 5!
LO BUENO
- Visualmente no sólo se mantiene a la altura del juego de 2018, sino que transforma por completo los Nueve Reinos con un entorno gélido y electrizante, con algunos de los escenarios, personajes y batallas más asombrosas que se han visto en un videojuego actualmente. Muy superior la versión de PS5 sobre la de PS4, obviamente.
- El sonido es impecable tanto en su score como efectos de sonido y voces (incluyendo español europeo y latino) son épicas, perfectas e inmersivas a la aventura.
- El sistema de combate es una belleza, y el reto y los extras jamás se sentirán de más o repetitivos.
LO MALO
- El sistema de progresión evoluciona bien con respecto al GoW anterior, pero la asombrosa cantidad de armaduras acaban quedando de más, cuando descubres que puedes perfeccionar hasta el máximo incluso la más básica, si la llevas con el herrero.
- Sigue siendo un poco frustrante tener que sacrificar calidad por rendimiento en lo visual. ¡Ya queremos que estos juegos de nueva generación ofrezcan ambas características por default!
EN CONCLUSIÓN
Recuerdo muy bien que llamé “Obra Maestra” al resurgimiento de God of War en 2018… pero con esta nueva secuela no sólo se retoma esta etiqueta, sino que Santa Monica la lleva más allá, convirtiendo a God of War: Ragnarok en uno de los videojuegos más grandes de todos los tiempos. ¡Imposible no vivirlo, si te proclamas como gamer de hueso colorado!
God of War: Ragnarok ya está disponible exclusivamente en PlayStation 4 y PlayStation 5.
Por Julio Vélez, Spanish Editor en Crunchyroll. ¡Síganlo en Twitter e Instagram!
Con la colaboración especial de BearMan.